Saltar al contenido
Revista digital de entretenimiento Vaya Potra

¿Es posible unir dos metales sin soldar?

septiembre 22, 2022
unir dos metales sin soldar

Las soldaduras eléctricas o por calor ya han quedado totalmente desactualizadas con las tecnologías con las que se cuenta hoy en día, ya que, en los tiempos podernos, es posible unir dos metales sin soldar con una enorme facilidad, en poco tiempo y con un gasto energético y económico mínimo.

Si quieres saber de qué estamos hablando, te invitamos a que leas este post, donde encontrarás toda la información sobre cómo unir dos piezas metálicas sin la necesidad de acudir a las viejas y costosas soldaduras.

¿Cómo unir dos metales sin soldadura?

Para iniciar esto, presentamos lo que se conoce como clinchado, también llamado “soldadura en frío”, puesto que no utiliza calor producto de la electricidad o de la elevación de temperatura, sino que utiliza materiales muy sencillos y reutilizables.

El clinchado o clinchado de chapas consiste en un proceso mediante el cual se colocan dos o más piezas metálicas entre medio de un punzón y una matriz. El pisador mantiene estas piezas unidas a medida que el punzón desciende, penetrando así el material hasta un tope mecánico.

Cuando las chapas están en contacto con la matriz, el punzón ejerce tal compresión que permite que se unan, lo cual se conoce como deformación con anclaje mecánico.

Se trata de un plan muy vanguardista patentada por la empresa juradotools.com, líder nacional e internacional en el sector del clinchado y fabricante único de estas herramientas.

¿De qué sirve unir dos metales sin soldar?

A partir de la unión de dos piezas metálicas sin necesidad de realizar una soldadura, es decir, utilizando el método de clinchado que te explicamos previamente, obtendrás muchas ventajas.

Una de las principales ventajas que suponen la unión de dos piezas sin utilizar soldadora es que el precio es muchísimo más económico; las viejas soldadoras no solo son bastante caras para conseguirlas, sino que también consumen una gran cantidad de energía.

Otra gran ventaja es la de poder controlar con mayor facilidad el punto de unión entre las dos piezas metálicas. Con una soldadora, a pesar de que los puntos de soldadura quedan bien unidos, en muy pocas ocasiones estos puntos quedan totalmente lisos, ya que esto requiere una gran maniobrabilidad del soldador. En cambio, con la soldadura en frío, esto no sucede.

Además de esto, la unión de dos piezas por medio de la soldadura en frío permite que, sumado al bajo coste económico, las herramientas y maquinarias utilizadas duren muchos años más, posiblemente más del doble de lo que dura una soldadora.

Gracias a esto podemos constatar en que la soldadura en frío no solo es mucho más sencilla de utilizar, sino que permite un ahorro económico inimaginable y una mayor vida útil de los materiales utilizados. Y no nos olvidemos de un factor importante, es un método mucho más seguro y confiable.